Co-Directorxs en acción: Una entrevista en conjunto con All*Above All y ReproAction

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¿Por qué eligieron la co-dirección como modelo para su organización? ¿Qué es lo más gratificante de ello? ¿Cuáles han sido los retos?

Pamela J. Merritt,  Co-Director de ReproAction (PJM): Tuvimos largas conversaciones en las que discutimos todo, desde el estilo de liderazgo hasta la visión del movimiento y el estilo de comunicación previo a tomar la decisión de ser co-directoras. Creo que esas conversaciones aclararon todo para mí, no porque siempre estemos de acuerdo en todo, sino porque nos podemos comunicar muy bien entre nosotrxs. Me encanta tener a alguien a quien respeto y en quien confío, de quien puedo aprender y obtener consejos. También aprecio tener a alguien que ha estado conmigo en esto desde el primer día y que se da cuenta de cuán lejos hemos llegado desde ese momento y todo lo que hemos construido. Abordamos los problemas de frente y rápidamente, y esa ha sido parte importante de que esta co-dirección sea una gran experiencia para mí.

Erin Matson, Co-Director of ReproAction (EM): Somos una organización con mucha experiencia en la acción directa, y hay toda una historia de organización y acción directa que ha acompañado al cambio transformador bajo liderazgos colaborativos. Eso fue lo más atractivo para mí de este modelo. Es intensamente gratificante porque estoy segura que Pamela o yo podríamos, solas, liderar una gran organización. Pero con las dos juntas, y nuestros esfuerzos colaborativos, el todo es mucho mejor que la suma de las partes. Creo que el éxito de ReproAction no puede dividirse entre la sinergia de nuestra alianza y las perspectivas más fuertes que surgen del trabajo colectivo. Sobre los retos, algunas veces hay confusión con respecto a qué es responsabilidad de quién, pero eso no es difícil de resolver.

Silvia Henríquez, Co-Director de All* Above All (SH): Personalmente, he estado sola en la posición de Directorx Ejecutivx (DE) y el sacrificio y la soledad que viene con ese rol es muy desafiante, y esperaba encontrar un mejor y más balanceado modelo. El aspecto más gratificante es tener unx compañerx de pensamiento y alguien en quien confío con quien puedo verificar mis intuiciones. El aspecto más exigente es asegurarme que estoy manteniendo los valores de transparencia, confianza, y toma conjunta de decisiones en todo momento. A veces las cosas se mueven muy rápidamente y me gusta asegurarme de siempre representar lo que hemos acordado en una manera justa y balanceada tanto interna como externamente.

Quiero decir también que empecé como DE en este movimiento cuando tenía 27 años. Ahora tengo 45. Casi se cumplen 20 años de estar en un rol de liderazgo. Desafortunadamente tengo muy pocos colegas en quienes puedo confiar y creo que es porque no he estado en una organización en la que no sea la responsable final de todo, además de supervisar a lxs demás desde mis 20. Esto puede ser agotador emocionalmente. Me importa profundamente el trabajo de acceso al aborto —es así como empecé a trabajar hace más de 20 años— pero estar en una posición solitaria de 'jefe' no es atractivo para mí y creo que un modelo de liderazgo compartido, aunque sea más desafiante, me empuja a siempre dar lo mejor de mí y estar presente al 100%.

Destiny Lopez, Co-Director de All* Above All (DL): Silvia y yo nos conocemos desde que ella empezó como DE en el National Latina Institute for Reproductive Health, cuando ambas llegábamos al final de la veintena. Como trabajé en varias organizaciones del movimiento durante su titularidad como DE, sobre todo en el espacio de los derechos reproductivos, constantemente encontramos maneras de colaborar para empoderarnos dentro de la comunidad Latinx, entre mujeres de color, y dentro del movimiento de justicia reproductiva. A través de todo esto forjamos confianza y aprendimos sobre las fortalezas de cada quien, y los aprendizajes de cada unx como líderes. Cuando ella me propuso trabajar con All*, primero como consultora, más tarde como subdirectora, y finalmente como co-directora, no fue difícil unirme a ella. Sabía que compartíamos una visión sobre el acceso sin restricciones al aborto para personas de color y ambas buscábamos tener una cultura laboral en la que pudiésemos mostrarnos como éramos enteramente: como defensoras, madres, mujeres de color, Latinas, etc. El compromiso con esa cultura laboral y la confianza que construimos a través de los años nos permitió ser verdaderas compañeras de pensamiento y liderar en un modo en que complementamos nuestras fortalezas y balanceamos esos aprendizajes.

¿Cómo encuentran balance entre dos personas? ¿Cómo deciden quien toma cuál responsabilidad? ¿Qué me dicen de las diferencias en modos de dirigir o en modos de tomar decisiones? ¿Cómo se presenta esto?

EM: Cada miembro del equipo, incluyendo las Co-Directoras, tiene roles definidos con los que están comprometidxs en papel —estas no son descripciones de trabajo, sino documentación adicional sobre nuestra función, responsabilidad, y atributos necesarios que reflejan cómo trabajamos y de los que somos responsables todos los días. También tenemos objetivos claros que se actualizan anualmente. Como Co-Directoras revisamos nuestros progreso hacia nuestros objetivos individuales entre nosotrxs durante revisiones trimestrales. Pero nos esforzamos por por respetar las diferencias en lugar de trabajar para tener una unidad de estilo.

PJM: Comunicación y roles y objetivos claramente definidos son partes críticas. Hemos dialogado extensivamente sobre estilos directivos, sobre formas de comunicación, aversiones, fortalezas, antes de aceptar un modelo de co-dirección. Pero los elementos más importantes son comunicarse de manera valiente, la escucha activa y el respeto. No dejar que las cosas se acumulen, y tenemos intenciones de intercambiar y comunicarnos de manera clara y respetuosa.

SH: Tenemos un coach ejecutivo que nos ayuda cuando estamos batallando con preguntas/tensiones o cambios. Ambas tenemos diferencias en modos de dirigir y eso en parte hace que nuestro modelo funcione. Tomamos todas las decisiones juntas e intentamos tener un frente unido tanto interna como externamente.

También hemos intercambiado responsabilidades cuando alguna se siente atorada, sin desafíos o a punto de estar demasiado exhausta. Cambiar los aspectos de nuestro trabajo lo mantiene interesante y asegura que nos hagamos responsables.

DL: Yo estoy de acuerdo con mucho de lo que Silvia dijo antes y que ambas tenemos áreas específicas en las que somos expertas y habilidades muy propias de cada una, que se complementan entre sí, y que generalmente se alinean con lo que la campaña necesita en cualquier momento, y eso hace que se repartan roles más fácilmente. Dicho lo anterior, darse la flexibilidad para probar cosas nuevas cuando se intercambian roles ayuda a que el trabajo y los roles sean sostenibles. No puedo dejar de enfatizar cuan importante es que los estilos de dirección, liderazgo y toma de decisiones sean complementarios. No creo que este modelo funcione si no se tiene esa conciencia y balance: inclinarse demasiado por un estilo u otro puede ser demasiado intenso tanto para las propias co-directoras como para el staff y los compañeros.

¿Con qué ideas equivocadas o confusas se han encontrado dentro del movimiento de salud, derechos y justicia reproductiva con respecto a la co-dirección? ¿Algo en particular les ha sorprendido?

EM: Muchas personas que me preguntan sobre el modelo de co-dirección parecen más interesadas en el aspecto de compartir el trabajo. Es cierto que tener unx co-directorx puede ser un paso más allá del 'todo es mi responsabilidad' que tiene unx directorx ejecutivx; el trabajo se comparte. Pero yo diría que los beneficios reales del modelo van más allá de compartir la carga de trabajo. El liderazgo colaborativo se trata de tener más perspectivas y construir estrategias superiores para ganar. Creo firmemente en el poder del liderazgo colaborativo —y el liderazgo colaborativo multi-racial— y el potencial que ofrece al movimiento progresista para reimaginar cómo se ve el poder y cómo se expresa.

PJM: Estoy totalmente de acuerdo con Erin. Empezamos nuestro co-liderazgo usando un documento compartido que servía para contestar preguntas e identificar áreas que queríamos explorar antes de tomar la decisión de trabajar juntas. Desde el primer día hemos trabajado en modo colaborativo, incluyendo el proceso de planeación estratégica y ha sido una gran experiencia.

SH: Creo que algunas personas a veces han tratado de dividirnos o han elogiado a una sin reconocer los esfuerzos de ambas.

DL: Totalmente de acuerdo con eso. Particularmente porque hemos establecido roles internos muy claros, a las personas se les puede olvidar que es un esfuerzo conjunto.

También creo que a veces es desafiante para lxs demás tenernos a ambas en juntas o mesas de directivos porque la mayoría de las organizaciones es representada por una sola persona. No quieren que nuestra voz sea demasiado fuerte, aunque creo que somos buenas para dividirnos en las reuniones y balancear nuestras voces cuando estamos en un espacio juntas.

¿Qué consejo le darían a otrxs que estén considerando el mismo modelo?

EM: El modelo de co-dirección es una forma poderosa de expandir las capacidades del liderazgo de tu organización, pero no es para todxs y quizá no funcione si otros les imponen el rol a dos personas, algo así como el consejo de directores arreglando un matrimonio. Tiene que ser algo que lxs líderes quieran por ellxs mismos. Pamela y yo decidimos darle una oportunidad a ReproAction tras tener conversaciones de siete horas con preguntas sobre nosotras mismas, nuestros estilos de liderazgo nuestras esperanzas acerca del trabajo, específicamente cómo incrementar el acceso al aborto y cómo avanzar en justicia reproductiva, y nuestras esperanzas para el movimiento. Construimos esta organización basadas en la confianza mutua y seguimos trabajando con intenciones de seguir alimentando esa confianza. Después construimos un plan estratégico en conjunto, lo hacemos literalmente palabra por palabra al teléfono y definimos los roles claramente con sus responsabilidades, esto quiere decir que podemos movernos ágil y rápidamente para ejecutar nuestra visión.

PJM: Hay quien cree que la co-dirección es un constante estira y afloja, pero esa no ha sido mi experiencia ni creo que sería exitoso o satisfactorio. Es crucial que ambxs líderes practiquen comunicarse clara y valientemente, y que los roles y responsabilidades de cada quien estén definidos.

SH: La decisión debe ser personal y profesional. Pero la relación debe iniciarse a nivel profesional y no al revés. Tienen que escogerse entre ustedes, conocerse antes de llegar a este modelo.

DL: Estoy muy de acuerdo con que hay que escogerse mutuamente. Tener un historial de trabajo en conjunto ayuda inmensamente —se aprende mucho sobre el estilo de liderazgo de una persona, sus detalles, su manera de ser y hacer en el mundo al trabajar con ellxs. Sus vidas laborales estarán profundamente interconectadas en este modelo, por lo que tener estos acuerdos será crucial para que ambxs puedan decidir si es el modelo adecuado (y con quién) y cómo alcanzar su éxito.

¿Tomaron algún entrenamiento profesional que le recomendarían a lxs demás?

PJM: Yo recomiendo mucho 'El arte del liderazgo' del Rockwood Leadership Institute's Art of Leadership. Participé como becaria del Rockwood Reproductive Health, Rights and Justice en 2017 y transformó cómo me aproximo a mi liderazgo y a mi rol en el movimiento. Este entrenamiento fue de mucha ayuda para identificar mi visión y las maneras de balancear pasión con ecología personal.

Lo mismo. 'El arte del liderazgo' de Rockwood; recientemente empecé como becaria en Rockwood Reproductive Health, Rights and Justice, en 2019, y sigo procesando todo lo que aprendí de 'El arte del liderazgo'. Además, el Centro de Administración una gran fuente de información, y disfruté mucho el entrenamiento 'Administración para cambiar el mundo'. Aprecio que los materiales sean de acceso y código abierto en su sitio-web, desde plantillas hasta ejercicios para dar retroalimentación. ¡Chéquenlo!

DL: No es un entrenamiento per se, pero he tomado ambos y valoro mucho que se tomen el tiempo para el desarrollo de liderazgo en un lindo espacio y algunas de las herramientas que ofrecían sobre detonantes y conversaciones valientes.

¿Cuántas pestañas tienen abiertas al mismo tiempo, en promedio?

PJM: Yo tengo 72 pestañas en 4 ventanas diferentes. Abro ventanas separadas para las tareas asociadas con mi rol como co-directora, y tengo las pestañas correspondientes abiertas dentro de la ventana de cada tarea. Este sistema me acomoda porque así es como prefiero relacionarme con mi trabajo.

EM: A mí me gusta tener limpio el escritorio, y opero igual con mi computadora. Hay 9 pestañas que regularmente mantengo abiertas para comunicarme y administrar el flujo de trabajo, y cuando termino de usar otra pestaña relacionada con los problemas con los que estoy lidiando, la cierro para dejar espacio para que nuevas cosas ocupen mi atención.

SH: Dos.

DL: Demasiadas. Para. Llevar. La. Cuenta.

Cuéntennos sobre el último buen libro que leyeron.

EM: Acabo de leer She Said de Jodi Kantor y Megan Twohey, sobre los reportajes que hicieron para el New York Times para desentrañar la historia de Harvey Weinstein, y me impacta la valentía de las mujeres que han hablado y el trabajo que les costó llegar allí. Creo que cada vez que una mujer respira profundamente y comparte su historia, es un acto radical. #MeToo muestra el poder de nuestras voces e historias para el cambio.

PJM: Yo acabo de terminar Say Nothing de Patrick Radden Keefe, sobre asesinato y memoria en Irlanda del Norte. Me cautivó desde la primer página, y nunca me soltó. Pasé más de una hora en mi librería feminista independiente favorita, Left Bank Books, antes de decidir que sería mi libro para las vacaciones. Es un placer excepcional poderme sentar en silencio y permitirme entrar en un libro tan brillantemente escrito.

SH: Little Fires Everywhere de Celeste Ng.

DL: Citizen: An American Lyric de Claudia Rankine, es un libro de poesía publicado en 2014 que llamó mi atención en los últimos dos años y cuyo impacto sigue conmigo, más que cualquier libro que haya leído recientemente. Es poderoso de tantas maneras: por la representación de las crudas realidades de vivir en cuerpos negros en este país; por su aproximación única y lírica hacia la prosa y la poesía; y por la yuxtaposición de arte y fotografía a través de toda la obra, que intensifica e ilustra.

¿Qué podcasts están escuchando ahora?

PJM: Soy aficionada del 'true crime' (crímenes reales), por lo que mi podcast favorito en este momento es Atlanta Monster. Me causa conflicto, pero es parte de procesar contenido de crímenes reales. El podcast puso mi memoria a prueba, y también me enteré de información nueva.

EM: No soy mucho de podcasts. Escucho episodios específicos que sean relevantes para mí. Sin embargo, últimamente me he metido en el mundo de los audiolibros. Estoy escuchando A Warning de Anonymous ahora mismo. Y como con cualquier otra cosa que eche un vistazo a la administración de Trump y la erosión de nuestras normas democráticas a beneficio de un líder autoritario, es muy perturbador, pero no podemos hacernos de la vista gorda.

DL: Mi equipo sabe que soy adicta a los podcasts. Acabo de terminar Dolly Parton's America, que es genial en cuanto al análisis de género y por su música, pero le falta un análisis sobre raza. Y está en pausa ahora, pero mi favorito sigue siendo Still Processing.

¿Quién las inspira dentro del movimiento de salud, derechos y justicia reproductiva y por qué? ¿Quién las inspira fuera del movimiento?

SH: A mí siempre me inspiran las personas que abortan. Sé que es una decisión personal y aún así es la decisión más empoderante que puede alguien tomar, por lo que me sigue inspirando y quiero seguir trabajando en este tema.

DL: Igual. También quienes apoyan a lxs que abortan. Fuera del movimiento, me ha inspirado mucho Adrienne Maree Brown y su libro, Emergent Strategy. Creo que nuestro movimiento necesita desesperadamente lo que ella ofrece y lo que dice sobre cómo aproximarse a construir y a generar estrategias juntxs.

EM: Me inspiran lxs activistas que están en la vanguardia, ya sea que cuenten historias de aborto, personas que acompañen a quienes abortarán para mantener la paz un sábado por la mañana, voluntarixs que ayudan a administrar fondos para abortar. Hay tantas personas que hacen trabajo de justicia social sin llevarse el crédito y sin tener fama, pero son parte de algo mucho más grande y dejan el mundo un poquito mejor que como lo encontraron. Lxs amo.

PJM: A mí me inspiran lxs voluntarixs y activistas, la gente que conozco todos los días y es apasionada y valiente. Mi vida se enriquece con el diálogo constante con lxs veteranxs del movimiento que siempre son generosxs con sus consejos y constructivos en sus críticas. El tiempo que paso con ellxs alimenta mi alma y me ayuda a mantener las cosas en perspectiva.